La cucaracha americana
Las cucarachas están consideradas como vectores trasmisores de enfermedades, tanto del tipo bacteriológico, viral y fúngico así como portador de parásitos.
Debido a su hábitat urbano (alcantarillas, huecos, ranuras) y a su alimentación principal (material en descomposición), está en contacto con gran cantidad de microorganismos y parásitos, muchos de ellos patógenos para el hombre. Pueden propagar numerosas enfermedades, tales como diarrea, disentería, conjuntivitis, gastroenterocolitis, infección de heridas, etc.
La cucaracha americana o rubia (Periplaneta americana) está provista de alas y puede realizar vuelos cortos, de un par de metros, sobre todo planeando. Prefieren los lugares oscuros y húmedos, aunque pueden vivir en lugares secos si tienen acceso a agua. Desarrollan su actividad preferentemente durante la noche.
Para evitar la contaminación de los alimentos es fundamental en recipientes herméticos. Del mismo modo, el recipiente donde dejamos la basura debe tener tapa.
Si querés saber un poco más, mirá acá:
Polillas: el enemigo de nuestras prendas!
Las polillas son mariposas cuyas larvas se alimentan de tejidos, atacando nuestras prendas de vestir -especialmente, las de lana-, alfombras, cortinados y tapizados.
Para evitar que se alimenten de la ropa, basta con colocar simples bolitas de naftalina en los placares en los que la guardamos.
En los casos de alfombras y tapizados, basta con pasar la aspiradora -lo que al mismo tiempo será útil para combatir los ácaros.
De todos modos, si notamos una infestación importante, lo mejor es avisarle a nuestro controlador de plagas para que aplique un producto específico.
Después de la lluvia… caracoles!
Los caracoles son moluscos gasterópodos provistos de una concha espiral. Los hay marítimos y terrestres.
Los que nos preocupan a nosotros son los que aparecen en nuestro jardín, sobre todo después de alguna lluvia prolongada. Se alimentan tanto de hojas muertas como de plantas vivas, por eso pueden ser muy dañinos.
Hay algunos muy pequeños, de unos pocos milímetros de longitud, pero también existe el caracol africano, que alcanza los 30 cm. de largo (recientemente aparecieron algunos ejemplares en la Provincia de Corrientes).
Algunas personas los coleccionan, y a otras les gusta comerlos. Si Ud. no están en ninguno de los dos grupos y su jardín fue invadido, puede convocarnos para que los eliminemos con un producto específico.
Si quiere conocer más sobre este animalito, vea en: http://es.wikipedia.org/wiki/Caracol
Atención al dengue en vacaciones
Afortunadamente, en Buenos Aires no hay epidemia de dengue. Sin embargo, cuando nos trasladamos de vacaciones a otras regiones, involuntariamente podemos convertirnos en portadores de la enfermedad.
Para evitarlo, basta con utilizar repelentes. La mayoría de los aerosoles se pueden colocar incluso sobre la ropa, sin mancharla. También es importante repetir el rociado, ya que su efecto no es duradero.
http://www.0223.com.ar/k/2014-1-2-dengue-el-mosquito-no-esta-en-mar-del-plata-pero-anda-cerca
Las arañas: parecen insectos, pero no lo son
Las arañas no son insectos, sino arácnidos. Viven en todos los continentes -incluso en lugares de climas fríos-, excepto en la Antártida.
Las arañas poseen un par de apéndices denominados «quelíceros» que les sirven para atrapar a sus presas. Estos apéndices están asociados a una glándula venenosa que les sirve para inmovilizar a sus presas y luego inocularles jugos digestivos.
Desempeñan un papel importantísimo como depredadores, pues son las mayores consumidoras de insectos que hay en el planeta y contribuyen decisivamente en controlar su número.
Sin embargo, a pesar de este aspecto benéfico, no es aconsejable dejarlas proliferar, pues aunque la mayoría son demasiado pequeñas para atravesar la piel humana con sus quelíceros, en algunos casos suelen picar a las personas. Cuando esto sucede, la mayoría producen efectos someros y locales, pero unas pocas especies pueden producir intoxicaciones sistémicas severas o necrosis (muerte del tejido) localizado pero extenso.
Todas las arañas producen una seda que les sirve para tejer la trampa donde atraparán sus presas, e incluso para desplazarse. Esta «tela de araña» es producida en pocas horas, por lo que la higiene de los posibles escondrijos (debajo de los muebles, en ángulos entre paredes, en los techos) es fundamental para combatirlas.
En http://es.wikipedia.org/wiki/Araneae encontrará más información sobre este depredador.
Acaros: qué podemos hacer para disminuir las molestias que ocasionan?
Los ácaros son una subclase de arácnidos diminutos: los que provienen de los folículos humanos miden 0,1 mm. y los del polvo doméstico alcanzan los 0,5 mm. Las garrapatas son un poco más grandes.
Aunque prácticamente invisibles para el ojo humano, son los responsables de varias enfermedades, tales como alergias y sarna.
Para disminuir los problemas que nos acarrean, podemos tomar algunas medidas prácticas:
- Mantener la higiene en el hogar, aspirando el polvo que se acumula en los tapizados y alfombras.
- No tender la cama inmediatamente después de levantarnos. Más bien, dejar que las sábanas se ventilen y, de ser posible, sacudirlas para eliminar los restos de piel que perdemos durante la noche, ya que son alimento para los ácaros.
- Si tenemos mascotas, mantenerlas limpias y revisarlas periódicamente, para evitar las garrapatas.
En http://es.wikipedia.org/wiki/Acari encontrará más información sobre estos animalitos.
Las moscas y la basura
Evidentemente, la basura no controlada atrae a las moscas, incluso cuando las condiciones climáticas les son adversas. En la ciudad de Usuhuaia se han transformado en un problema.
http://www.minutouno.com/notas/308357-sorprende-ushuaia-una-invasion-moscas
Temporada de mosquitos
El calor nos agobia, pero es un paraíso para los mosquitos, que encuentran excelentes condiciones para reproducirse.
El Culex es el mosquito más común en la ciudad. Durante el día permanece a la sombra, escondido entre las plantas, cortinados, debajo de los muebles y otros lugares poco ventilados, ya que no soportan el sol muy fuerte.
Al atardecer, cuando ya el sol no los molesta, salen de sus escondrijos y se tornan muy molestos.
Acá van algunos consejos para disminuir sus picaduras:
- Mantener los ambientes ventilados, con buena corriente de aire.
- Colocar mosquiteros en puertas y ventanas, cuando sea posible.
- Los bebés no toleran ni los repelentes ni los insecticidas (espirales, aerosoles e incluso, las aparentemente inofensivas pastillas), por lo que es aconsejable cubrir la cuna con un tul.
- Hacer fumigar los jardines y plantas con periodicidad, ya que aunque se eliminen los adultos, van naciendo las crías.
- No permitir que se acumule agua en vasijas, baldes, juguetes, macetas y otros recipientes, ya que allí depositan las larvas. Por el mismo motivo, cambiar el agua de los jarrones al menos día por medio.
- Usar repelente. Los aerosoles se pueden aplicar incluso sobre la ropa.
- Usar ropas de color claro, que les resultan menos atractivas que las oscuras.
- Permitir que el fumigador cumpla con su tarea, aunque no existan cucarachas, ya que los productos que se aplican también son letales para los mosquitos.
Colonizadoras argentinas
Si hablamos de hormigas, no hay como las argentinas.
Con total prescindencia de los avatares de nuestra historia, formaron colonias en Estados Unidos, Europa y hasta en la lejana Australia. Su afán imperialista desconcierta a los científicos. Algunas pistas: hablan de un fuerte espíritu comunitario y una eficiente organización social y militar jamás alcanzada por ninguna especie animal. Quizás por eso imponen su poderío sobre otras familias de hormigas, incluso varias colonizadoras.
Las Linepithema humile, a principios del siglo pasado, subieron sus primeros contingentes a los barcos con exportación cerealera rumbo al norte. Luego, se esparcieron. Envidian su solidaridad, inteligencia y lealtad.
En fin, que es bueno tener conncacionales con convicciones.
Fuente: Oscar Angel Spinelli, Diario Clarín, 14/01/06. ospinelli@clarin.com
Hormigas podadoras: el terror de los jardines
Las hormigas son insectos sociales y cada individuo tiene asignada una tarea.
Las que habitualmente vemos en nuestro jardín son obreras que se ocupan de cortar hojas de las plantas y trasladarlas hasta el hormiguero; van rodeadas de soldados que las cuidan de otros insectos. Previamente, las exploradoras detectan la planta a ser podada y marcan el camino a seguir con feromonas.
En invierno, desarrollan su actividad durante el día. En verano, eligen las horas de menos calor y también trabajan de noche.
Cuando las podadoras llegan al hormiguero con los trocitos de hojas, otras obreras más pequeñas los acomodan en una cámara llamada «honguera», donde las cortan en trocitos más pequeños y cultivan un hongo, del que se alimentan.
También solemos ver hormigas aladas. Usan las alas en el vuelo nupcial, cuando son fecundadas por varios machos. Una vez fecundadas, estas hormigas pierden las alas y depositan los huevos en tierra, dando lugar a un nuevo hormiguero.