Cuidado con las picaduras de insectos

La mayoría de las veces las picaduras de insectos son inocuas, pero algunas veces pueden provocar algún daño que requiera cuidado especial.
En la mayoría de los casos, las mordeduras y picaduras de insectos se pueden tratar en casa fácilmente. Sin embargo, algunas personas tienen una reacción alérgica grave.
Estas son algunas de las recomendaciones para estos casos:
* Retirar el aguijón, si está presente. No utilizar pinzas, ya que éstas pueden apretar el saco del veneno y aumentar la cantidad de veneno liberado.
*Lavar muy bien el área afectada con agua y jabón.
* Cubrir la zona de la picadura con hielo (envuelto en un trozo de tela) durante 10 minutos, retirar otros 10 minutos y repetir el proceso.
* Si es necesario, en caso de saber que es alérgico a la picadura del insecto en cuestión o por recomendación del médico, tomar un antihistamínico o aplicar cremas que reduzcan la picazón.
*Durante los siguientes días, estar atento a señales de infección (como aumento del enrojecimiento, hinchazón o dolor).
Prevención
La prevención es lo mejor que puede hacer en cualquier caso, aunque ellos atacan cuando menos se espera, hay algunas medidas que puede tomar para evitar en lo posible las picaduras de insectos:
* No provocar a los insectos, especialmente los niños.
* Evitar los movimientos rápidos y bruscos cerca de colmenas o nidos de insectos.
* Intentar no usar perfumes y ropa con figuras florales o de color oscuro.
* Utilizar los repelentes para insectos apropiados y ropa protectora.
Fuente: latarde.com
Advertencia de la Organización Panamericana de la Salud

El llamado de la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS) apunta a reducir los índices de mortalidad y morbilidad causados por estas enfermedades transmitidas por «vectores», tal como se denomina a «los organismos transmisores de la afección».
Fuente: rosario3.com
Por qué la ciudad se llenó de mosquitos?

Los mosquitos no son sólo insectos que se ven con la humedad y el verano. Pese al frío, desde ayer la ciudad de Buenos Aires se vio invadida por estos molestos bichos. ¿Por qué ocurrió esto en la ciudad?
Consultado por LA NACION, el ingeniero agrónomo Eduardo Haene, exgerente operativo de la Reserva Ecológica, informó que la fuerte presencia de mosquitos se debe al viento que llega desde el río, que trae inevitablemente los mosquitos que allí se reproducen.
Reiteramos nuestras recomendaciones habituales para evitar que los mosquitos se reproduzcan:
- No dejar objetos en los que se pueda acumular agua, ya que allí se depositan las larvas.
- Colocar mosquiteros en puertas y ventanas, cuando esto sea posible.
- Renovar el agua de los floreros periódicamente.
Y para evitar que nos molesten los que ya están en casa:
- Utilizar repelentes.
- Si trabajamos en el jardín, utilizar prendas que cubran brazos y piernas.
Fuente: La Nación
Aunque se viene el frío, los mosquitos se quedan en nuestras casas

Los mosquitos se alimentan de la savia de los vegetales, así que en verano abundan porque el calor les es favorable para desarrollarse, pero también porque las plantas están en su mejor momento y les brindan más alimento.
Ahora se viene el frío en Buenos Aires, pero aún seguimos viendo mosquitos.
Un lugar que les es muy propicio para desarrollarse es el agua de los floreros, donde depositan los huevos y las larvas prosperan. Por eso es muy importante cambiar el agua de los floreros al menos cada dos días, para evitar que los huevos depositados lleguen a convertirse en adultos.
Además, si observaras que los mosquitos están demasiado molestos y el repelente no alcanza para mantenerlos a raya, conviene hacer una fumigación del jardín.
El calentamiento global aumenta la transmisión de enfermedades

El calentamiento del planeta no sólo acarrea desastres climáticos. También puede alterar los agentes ambientales que influyen en la transmisión de patologías transmitidas por vectores (insectos, parásitos…), multiplicando las poblaciones de mosquitos y especies, y prolongando su periodo de actividad
Fuente: lavanguardia.com
Plantas que nos ayudan a ahuyentar insectos

Las plantas aromáticas no requieren de grandes superficies para desarrollarse, muchas veces podemos cultivarlas en macetas. En el jardín o la huerta, podemos alternarlas con las demás plantas.
Además de ser ornamentales, tienen la propiedad de ahuyentar insectos dañinos -como moscas o mosquitos- y atraer a los benéficos -como las abejas y las mariposas.
- Romero: sus ramitas pueden utilizarse también para aromatizar carnes rojas. Si las cocinamos al horno, es preferible agregarlas unos minutos antes de terminar la cocción, para evitar que se quemen.
- Menta: las hojas pueden utilizarse tanto frescas (para decorar el plato) como secas (para hacer infusiones o aromatizar carnes rojas).
- Albahaca: las hojas se pueden utilizar para caldos y salsas. Picadas con ajo y nuez, hacen un excelente pesto.
- Lavanda: si ponemos hojitas en una bolsita se puede utilizar para aromatizar la ropa.
Utilizando las aromáticas, protegemos el medio ambiente y disminuimos el uso de elementos tóxicos.
El miedo a los insectos ocupa el cuarto lugar entre las fobias de los argentinos

Es sabido que casi todas las personas detestan las plagas domésticas, por inofensivas que éstas parezcan a simple vista. Sin embargo, en algunos casos el desagrado se puede convertir en una verdadera fobia.
Según un estudio reciente, la entomofobia (miedo a los insectos) ocupa el cuarto lugar en la lista de las fobias de los argentinos, después de la claustrofobia (miedo al encierro), la aerofobia (miedo a viajar en avión) y la emetofobia (miedo a vomitar).
Pero los miedos son regionales. Por ejemplo, en Inglaterra, aparece la ofidiofobia (miedo a las serpientes) en el segundo lugar, la aracnofobia (miedo a las arañas), en el cuarto y la musofobia (miedo a los ratones), en el sexto.
Ya sea que les tengamos una aversión natural -todos sabemos que de alguna u otra forma son dañinas- o una fobia inexplicable, lo mejor es tener las plagas bien lejos de casa, o al menos bajo un control razonable.
Fuente: Diario Clarín
La constancia es clave en el control de plagas

Suele suceder que, a medida que se alejan el verano y las altas temperaturas, se disminuyan las actividades relacionadas con el control de plagas. Esto es un grave error, ya que para mantener las plagas domésticas en un índice aceptable, es necesario ser constante con el control.
Bajar la guardia da lugar a la proliferación de insectos y roedores oportunistas, cuyo número puede aumentar radicalmente, complicando el mantenimiento de la higiene del hogar.
Como ejemplo, podemos ver que en España -entre otras plagas- está proliferando la chinche de cama, un insecto que prácticamente había desaparecido. Por otra parte, este insecto siempre había estado asociado a la pobreza; sin embargo, debido a la globalización, está invadiendo hoteles de lujo y hogares de clase media.
Fuente: Cinco Días
Nuestras aliadas, las lagartijas

Aunque a muchas personas les resultan desagradables, las lagartijas son buenas aliadas en el control de plagas.
Al igual que los sapos y ranas, se alimentan de insectos, constituyendo un control biológico que protege el medio ambiente.
El clima de Buenos Aires es cada vez más cálido, lo que sumado a la importación de frutas y otros productos provenientes de países tropicales, hace que estos animalitos lleguen como polizontes junto con la carga.
En sus lugares de origen, las personas ya están habituadas a la convivencia y no les hacen ningún caso. En nuestra ciudad, en cambio, generan el rechazo de la mayoría. Esto es lamentable, ya que las lagartijas no sólo son inofensivas, sino que pueden contribuir a disminuir la población de moscas, mosquitos, hormigas y otras plagas domésticas.
Leishmaniosis cutánea

Es una enfermedad que provoca graves lesiones en la piel.
La transmisión se produce cuando un flebótomo pica a un animal infectado y luego a una persona sana. Estos insectos suelen atacar las zonas más expuestas del cuerpo, como rostro, manos, brazos y piernas.
Síntomas: en el lugar donde se produjo la picadura aparece primero una mancha elevada y sólida de menos de un centímetro. Luego la mancha se convierte en una úlcera (una lesión abierta) indolora que permanece semanas o meses sin sanar. En caso de sanar, queda una cicatriz deprimida, como un pequeño pozo en la piel. En algunos casos la enfermedad puede provocar lesiones en la nariz o la boca.
Fuente: http://www.facmed.unam.mx/deptos/microbiologia/parasitologia/leishmaniosis.html