Una alianza con caléndulas protege nuestra huerta
Tener una huerta en casa puede ser una tarea gratificante: nos brinda verduras más frescas, siempre a mano y sin fertilizantes artificiales.
Pero la verdad es que las plagas suelen invadirla y no queremos utilizar elementos tóxicos para ahuyentarlas.
Una manera de evitar que los pulgones ataquen nuestras verduras es plantar caléndulas bien cerca.
Las caléndulas son de color amarillo o anaranjado, uno de los preferidos de los insectos. No sólo atrae a los benéficos, los polinizadores, sino que también atrae a los pulgones, que se alimentan de savia y pueden estropear nuestras verduras. Como el tallo de las caléndulas segrega una sustancia pegajosa, los pulgones quedan adheridos y no afectan nuestras verduras.
Fuente: Taller de huerta orgánica de la UFLO
El control biológico es una solución para cultivos y jardines
Técnicos del Inta Famaillá (Tucumán) y de la Fundación Miguel Lillo, mediante iniciativas de control biológico, lograron reducir el impacto causado por plagas de trips (insectos) para la producción frutícola.
Según manifestó Daniel Kirschbaum -especialista en frutihorticultura del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria Famaillá– “los insectos depredadores constituyen uno de los grupos más importantes de enemigos naturales de los que son plaga”.
En nuestro jardín, las «mariquitas» o «vaquitas de San Antonio» son uno de los depredadores de plagas.
Fuente: diariobae.com