Polillas: en Londres las combaten con feromonas
En el Museo de Historia Natural de Londres las polillas se convirtieron en una pesadilla: su densidad es tan alta que han puesto en peligro colecciones invaluables.
Buscando una solución menos tóxica que la aplicación de venenos, la empresa británica Exosect ha desarrollado un producto basado en feromonas femeninas.
El mecanismo de aplicación es simple: se atrae a los machos con feromonas obtenidas de las hembras de la misma especie y se los rocía con este producto. Los machos rociados con feromonas femeninas atraen otros machos, que los confunden con hembras. De este modo, se evita la reproducción.
Se trata de un sistema polémico que pone sobre la mesa los interrogantes acerca de cuál es la capacidad para manipular su entorno y cuáles son los límites del ser humano. No es menos cierto que es una estrategia mucho menos agresiva que el uso de insecticidas.
Si el producto resultara exitoso, se acabaría con las polillas rápidamente.
Mientras tanto, acá van algunas recomendaciones para evitar que las polillas se conviertan en una pesadilla en casa:
- Cuando se guarda la ropa de una temporada para la otra, se la debe lavar previamente.
- Habitualmente, con colocar algunas bolitas de naftalina en el placard es suficiente para evitar el ataque de las polillas.
- Si detecta que alguna prenda está comida por polillas y desea conservarla de todos modos, lávela bien antes de introducirla en el placard junto con otras, para matar los insectos antes de que extiendan su ataque.
- Antes de introducir en nuestro hogar una prenda o un mueble tapizado usados, revisarlo bien. Muchas veces éstos vienen acompañados de su propia población de polillas.
Si el problema es más grave se requerirá la intervención de un experto, que aplicará productos específicos. En ese caso, llamanos y encontraremos una solución rápida y sencilla.
Fuente: Ciencia
Las polillas y su visión nocturna
Las polillas son mariposas de hábitos nocturnos. Al igual que las diurnas, también se alimentan de néctar de flores.
Partiendo de estudios anteriores, los científicos establecieron la hipótesis de que las polillas halcón ralentizaban su sistema nervioso, haciendo que su proceso de percepción visual fuera más lento para así poder captar mejor la poca luz existente; pero a cambio perdían precisión para seguir el balanceo de las flores.
A partir del análisis de los resultados obtenidos en las diversas pruebas, cuenta Sinc Simon Sponberg, físico del Instituto de Tecnología de Georgia (EEUU) que ha dirigido el estudio publicado en la revista Science,
“vimos que aunque su sistema nervioso iba más despacio, esto solo era una desventaja cuando la flor se movía a una velocidad mucho mayor de la natural”. Los insectos eran capaces de seguir la trayectoria de las flores que iban a hasta 20 oscilaciones por segundo, mucho más que el ratio habitual de dos oscilaciones por segundo observado en flores reales. Dado que las polillas pueden mover sus alas 25 veces por segundo, tenían que adaptarse casi en cada aleteo. De esta forma, “las polillas halcón sacrifican parte de su velocidad de visión para ser capaces de captar mejor la luz, pero este sacrificio no es importante porque únicamente afecta a su habilidad para rastrear movimientos que no se producen de manera natural en las flores”, determina el científico.
El estudio ha sido cofinanciado por la Air Force Office estadounidense y podría ayudar en el diseño de la próxima generación de robots voladores para que sean capaces de operar de forma eficaz en diversas condiciones de luz. “Debido a que los insectos tienen ojos muy pequeños y un sistema nervioso diminuto, han evolucionado hasta adoptar soluciones muy difíciles, robustas y comparativamente simples soluciones a problemas difíciles” explica a Sinc Eric Warrant, biólogo sueco que también ha estudiado los sistemas de visión nocturna de los insectos. “Dado que se pretende que los robots sean capaces de realizar buena parte de las tareas que realizan estos insectos, entender la forma en que estos consiguen adaptarse al vuelo nocturno puede dar buenas pistas para conseguir el mismo grado de solidez y sofisticación”, concluye.
Fuente: ecoticias.com
Cómo preservar tus libros del ataque de insectos
Muchas veces nos ha sucedido que, al abrir un libro que hace mucho no ojeábamos, notamos unos insectos pequeños, color gris, con numerosas patas. Se trata del «pececillo de plata».
Para evitar que ataque nuestra biblioteca, bastará con colocar algunas hojas de laurel entre las páginas.
Otros insectos que suelen atacar nuestros libros son las polillas. En este caso, bastará con colocar algunas bolitas de naftalina en la biblioteca y el olor las ahuyentará.
Recordemos que si hay mucha humedad, los libros pueden enmohecerse. Si el ambiente está muy seco, en cambio, las hojas pueden resquebrajarse. Es decir, al ambiente en el que guardamos los libros no debe ser ni extremadamente seco ni extremadamente húmedo.
Por último, si los vamos a sacar de circulación y los colocamos en un baúl, será bueno colocar una bolsita con lavanda, que ahuyenta los insectos.
Fuente: coffeandsaturday.com
¿Por qué los insectos vuelan hacia la luz?
Es muy común encontrar cadáveres de insectos debajo de las lámparas que quedan encendidas durante la noche.
Las polillas, por ejemplo, son atraídas por la luz de la de luna, que ciertas especies de este insecto utilizan como referencia para emigrar debido a que equilibran su trayectoria de vuelo de acuerdo con la rotación de la tierra: incluso algunas investigaciones dan cuenta de un sistema de brújula geomagnética interna, que contribuye a que las polillas vuelen en la dirección correcta. Sin embargo, la luz artificial que utilizamos para iluminar nuestro espacio las desorienta y las “re-dirige”, primero a un sobrevuelo a la luminaria en turno, y después a la muerte.
Cabe mencionar que las polillas son atraídas principalmente por algunas longitudes de onda, como la ultravioleta. Así, una luz blanca las atrae más que una amarilla. Asimismo, la distancia de la luz ejerce una reacción peculiar en los insectos, ante la luz natural, y debido a su lejanía, llegan de forma equitativa a los ojos de éste, pero cuando la luz (como ocurre con la artificial) es más próximo a uno de los ojos, obliga a los insectos a mover con más frecuencia una de las alas, lo que explica su movimiento circular entorno a la luminaria.
Fuente: iluminet.com
Las polillas van a la guerra?
Por el momento se utilizan drones, pero el Pentágono está experimentando con polillas.
Biólogos de EEUU han logrado insertar electrodos en polillas. El plan es controlar el vuelo y utilizarlas como espías.
Es decir, hasta ahora sólo nos preocupaba que estropearan nuestra ropa o nuestros alimentos, pero en un futuro, quizás nos estén vigilando!
Si te interesa saber más, te dejamos la fuente: minutouno.com
Una polilla en la oreja?
Todo el mundo sabe lo molestos que pueden ser los insectos. Sin embargo, lo sucedido a Rob Fielding –un hombre casado de 43 años residente en Buckinghamshire (Inglaterra)- demuestra que siempre es necesario tener a mano un buen insecticida. Y es que, hace varias jornadas, una polilla se introdujo en su cabeza y tuvo que ser extraída por los médicos tras tres días «zumbando» en su interior.
Ante cualquier situación similar, lo más recomendable es acudir al médico a la brevedad.
Si querés conocer cómo sucedió esto, te dejamos la fuente: opinión.com.bo
Otra recomendación es no tocar las polillas, pues algunas pueden ser tóxicas.
¿Por qué la luz atrae a los insectos?
No todos los insectos son atraído por la luz.
Esto sólo ocurre con los denominados lucífogos: polillas, mariposas, moscas, etc. Por instinto, estos insectos se sienten atraídos por la luz, que pauta su comportamiento. La luz nocturna natural, como la de la luna o las estrellas, les sirve para orientarse; como esta fuente lumínica está a gran distancia, ambos ojos la reciben por igual. Por el contrario, si colocamos una luz artificial, uno de sus ojos recibirá más luz que el otro, lo que explica el vuelo circular alrededor de una lamparita y la cantidad de cadáveres que encontrarás en la mañana.
Existen otros insectos que escapan a la luz, como las cucarachas y los gusanos.
Si querés ver la nota completa, te dejamos la fuente: Portalnet.cl
Invasión de polillas en Buenos Aires
Lo malo: son feas y molestas.
Lo bueno: no atacan las prendas ni afectan la salud de las personas y su ciclo de vida es corto.
Fuente: Diario La Nación
Polillas: el enemigo de nuestras prendas!
Las polillas son mariposas cuyas larvas se alimentan de tejidos, atacando nuestras prendas de vestir -especialmente, las de lana-, alfombras, cortinados y tapizados.
Para evitar que se alimenten de la ropa, basta con colocar simples bolitas de naftalina en los placares en los que la guardamos.
En los casos de alfombras y tapizados, basta con pasar la aspiradora -lo que al mismo tiempo será útil para combatir los ácaros.
De todos modos, si notamos una infestación importante, lo mejor es avisarle a nuestro controlador de plagas para que aplique un producto específico.