Arañas: qué debemos hacer ante una mordedura
Las arañas no son insectos, son arácnidos: una clase de artrópodos con cuatro pares de patas y ojos simples; no poseen antenas.
Las picaduras de algunas arañas son sumamente peligrosas debido a su toxicidad, como sucede con la viuda negra. En otros casos, asustan más de lo que pican, como sucede con la araña pollito.
Picaduras de insectos: cómo actuar
El verano ya está aquí. La temperatura nos estimula para pasar más tiempo al aire libre, por lo que estamos más expuestos a las picaduras de insectos.
Cómo podemos prevenir las picaduras? Hay algunas medidas sencillas que podemos aplicar fácilmente:
- Utilizar prendas que cubran la piel, sobre todo al atardecer, cuando los mosquitos están más activos.
- Utilizar repelentes. En el caso de embarazadas y niños menores de dos años, sólo los que están preparados en base a citronella.
- No acercarse a panales de abejas o avispas. Si detectamos alguno en nuestro hogar, debemos hacerlo retirar por personal especializado. Podemos acudir a Defensa Civil, por ejemplo.
- Si desafortunadamente quedamos en medio de un panal, retirarse sin correr.
- Evitar el uso de perfumes y ropas coloridas, que atraen más a los insectos.
- Ser cautelosos al comer al aire libre. Una mesa llena de comida y bebida dulce atraerá moscas, abejas y avispas.
- Si dejamos ropa en el suelo, sacudirla antes de volver a usarla.
Si a pesar de las precauciones de todos modos sufrimos la picadura de insectos, tengamos en cuenta que:
- No hay que hacer torniquetes. Se puede colocar hielo para desinflamar.
- Ante la sospecha de alergias, concurrir al médico.
- Si nos picó una abeja, el aguijón quedará en la piel. Retirarlo raspando, ya que si lo tomamos con una pinza, inocularemos más sustancia irritante.
- No tomar aspirinas ni calmantes sin prescripción médica.
Fuente: diaadia.com.ar
Picaduras de insectos y arácnidos: cómo tratarlas
En general, las picaduras de insectos suelen ser inofensivas y -más allá de las molestias que causan- sus efectos pasan en unas horas o días. Algunas medidas generales a tener en cuenta son lavar la zona afectada con agua fría, extraer aguijones y aplicar lociones que disminuyan el prurito local.
Cuando analizamos cada caso en particular, vemos que las picaduras más comunes son:
- Mosquitos: sólo suelen ser peligrosos aquellos trasmiten dengue, chicungunya, malaria, etc. En general, en nuestra ciudad abunda el Culex, que es inofensivo. Bastará con aplicar agua fría para calmar la comezón.
- Abejas: al picar, el individuo pierde el abdomen y muere, por lo que una abeja sólo puede picarnos una vez. Si la persona es alérgica, puede producirse un shock anafiláctico y se requerirá la intervención de un médico. De lo contrario, bastará con retirar el aguijón (sin tocarlo, para no empeorar el cuadro) y aplicar compresas de agua fría.
- Avispas: el mismo individuo puede picar varias veces, por lo que son más peligrosas que las abejas. Si no hay alergia, bastará con aplicar compresas de agua fría para calmar el dolor.
- Arañas: en las viviendas suele habitar la «araña del rincón» que tiene un veneno poco tóxico pero capaz de traer complicaciones. Como en general no sabemos qué araña nos picó, conviene acudir al médico.
- Escorpiones: en la ciudad suelen esconderse en habitáculos oscuros, como las cámaras de electricidad, por ejemplo. Su picadura puede ser grave; conviene aplicar un torniquete para evitar que el veneno circule y acudir inmediatamente al médico.
El mejor modo de prevenir las picaduras es mediante el uso de repelentes, teniendo en cuenta que los menores de dos años y las embarazadas no deben utilizar productos que contengan DEET. En estos casos habrá que recurrir a aquellos productos elaborados en base a aceite de citronella, de menor efecto, pero seguros. También se puede utilizar aceite de citronella en el ambiente, lo que ahuyentará en cierta medida a los insectos. En cuanto a los dispositivos electrónicos que emiten sonidos de alta frecuencia, su eficacia no está comprobada.
También es importante proteger brazos y piernas con prendas que los cubran, sobre todo si estaremos expuestos a este tipo de alimañas.
Fuente: infosalus.com
El riesgo de picaduras en las vacaciones
Todos estamos acostumbrados a ver hormigas, cucarachas y otros insectos. En general, sabemos cómo actuar y evitar que nos molesten.
Sin embargo, durante las vacaciones podemos trasladarnos a otras zonas donde encontraremos alimañas a las que no estamos habituados. El peligro de que nos piquen se redobla, ya que no sabemos cómo defendernos.
Es el caso, por ejemplo, de los escorpiones y arañas en Bariloche. Los alacranes que se encuentran en esta región, no son venenosos, son de color marrón claro, miden entre 3 y 6 cm, con un par de pinzas delanteras, y un aguijón en la cola, cuya picadura es dolorosa y produce una hinchazón. Las arañas más comunes de importancia sanitaria son la viuda negra y la araña marrón o de los rincones:
- La Viuda negra mide 12 mm, es negra, con vientre globoso con una mancha roja o naranja en la zona ventral. Vive al aire libre, en zonas oscuras y húmedas, en general a nivel del suelo. No es agresiva, solo pica si se la molesta o aprieta
- La araña de los rincones o marrón mide 8 y 10 mm , es de color tostado o negruzco, tiene hábitos nocturnos, es huidiza y no agresiva. Se la suele encontrar detrás de cuadros, cajones o muebles.
Ante picaduras de estos animales, fundamentalmente de arañas, se aconseja la atención por parte de personal sanitario; es de gran utilidad orientar a quien se encargue de esta primera atención sobre las características generales del animal que causó la picadura.
Estos animales suelen esconderse o anidar en lugares como piedras, árboles, cuevas, huecos en la pared o el piso, artículos varios que permanecen largo tiempo a la intemperie, chatarra, etc., por lo que habrá que prestar atención si notamos enrojecimiento o alguna roncha en la piel de los niños.
También es recomendable sacudir la ropa y el calzado antes de ponérselo, pues éstos suelen ser un buen escondite.
Fuente: eldinahuapense.com
Cómo evitar las picaduras de arañas
Las arañas cumplen con una función dentro del ecosistema, ya que se alimentan de otros insectos. Muchas veces, los atrapan mediante las redes que tejen hábilmente; en otros casos, los cazan directamente.
En general, en las ciudades es poco probable que nos pique una araña. Son más bien asustadizas y huyen ante la presencia de los seres humanos. Sólo una docena de las aproximadamente 40.000 especies de arañas en el mundo pueden causar daños graves al ser humano adulto sano promedio. Aunque hay algunas muy peligrosas -como la araña de rincón o la viuda negra- aún así, los registros muestran que las mordeduras de estas arañas son muy poco frecuentes.
Para evitar las picaduras de arañas debemos tener en cuenta algunos consejos:
- Es fundamental mantener la higiene del espacio que habitamos. Tenemos que limpiar todos los rincones (incluso los de los cielos rasos), detrás de los cuadros, debajo de los muebles y cualquier lugar en el que las arañas puedan esconderse.
- Mantener los ambientes ventilados. Así evitaremos que aniden.
- Desprenderse de aquellos objetos que no utilizaremos. El hecho de no moverlos permite que las arañas los elijan para su hábitat.
Si a pesar de las precauciones nos llega a picar una araña, habrá que poner hielo en la zona, para desinflamarla. Luego se recomienda asistir al servicio médico y tratar de llevar la araña que nos picó, para que se pueda determinar si la especie es peligrosa o no.
La fumigación habitual que se realiza en los edificios de propiedad horizontal o en las casas particulares está destinada, en general, a otro tipo de plagas: cucarachas, hormigas, pulgas, etc. Sin embargo, también es útil para eliminar las arañas.
Fuente: biobiochile.cl
El miedo a los insectos ocupa el cuarto lugar entre las fobias de los argentinos
Es sabido que casi todas las personas detestan las plagas domésticas, por inofensivas que éstas parezcan a simple vista. Sin embargo, en algunos casos el desagrado se puede convertir en una verdadera fobia.
Según un estudio reciente, la entomofobia (miedo a los insectos) ocupa el cuarto lugar en la lista de las fobias de los argentinos, después de la claustrofobia (miedo al encierro), la aerofobia (miedo a viajar en avión) y la emetofobia (miedo a vomitar).
Pero los miedos son regionales. Por ejemplo, en Inglaterra, aparece la ofidiofobia (miedo a las serpientes) en el segundo lugar, la aracnofobia (miedo a las arañas), en el cuarto y la musofobia (miedo a los ratones), en el sexto.
Ya sea que les tengamos una aversión natural -todos sabemos que de alguna u otra forma son dañinas- o una fobia inexplicable, lo mejor es tener las plagas bien lejos de casa, o al menos bajo un control razonable.
Fuente: Diario Clarín
Arañas en casa
Solemos pensar que mantener la casa limpia es suficiente para evitar que las arañas tejan su tela. Por supuesto, la higiene es fundamental para alejar todo tipo de plagas domésticas, y la mayoría de las veces, esto es cierto; pero a veces no es suficiente.
Es lo que le sucedió a esta familia de Londres, que debió fumigar su vivienda por una invasión de arañas que vinieron en las frutas que compraron.
Por eso, siempre es recomendable revisar y lavar las frutas y hortalizas antes de almacenarlos. De lo contrario, involuntariamente podemos estar dando refugio a alguna plaga que puede llegar a instalarse en nuestra casa.
Fuente: El comercio.com
Son peligrosas las arañas?
Según un estudio realizado por científicos de la Universidad Nacional del Sur y el CONICET, la mayoría de las arañas domésticas no representa un verdadero peligro para las personas. Aunque mencionan la «araña de los cuadros», que sí es bastante venenosa.
De todos modos, si bien la toxicidad de la mayoría de las arañas que encontramos en casa no llega a causar la muerte, recomendamos mantenerlas alejadas, ya que pueden despertar reacciones muy molestas.
Como siempre, la mejor manera de ahuyentar las plagas domésticas es con la higiene del hogar.
Las arañas: parecen insectos, pero no lo son
Las arañas no son insectos, sino arácnidos. Viven en todos los continentes -incluso en lugares de climas fríos-, excepto en la Antártida.
Las arañas poseen un par de apéndices denominados «quelíceros» que les sirven para atrapar a sus presas. Estos apéndices están asociados a una glándula venenosa que les sirve para inmovilizar a sus presas y luego inocularles jugos digestivos.
Desempeñan un papel importantísimo como depredadores, pues son las mayores consumidoras de insectos que hay en el planeta y contribuyen decisivamente en controlar su número.
Sin embargo, a pesar de este aspecto benéfico, no es aconsejable dejarlas proliferar, pues aunque la mayoría son demasiado pequeñas para atravesar la piel humana con sus quelíceros, en algunos casos suelen picar a las personas. Cuando esto sucede, la mayoría producen efectos someros y locales, pero unas pocas especies pueden producir intoxicaciones sistémicas severas o necrosis (muerte del tejido) localizado pero extenso.
Todas las arañas producen una seda que les sirve para tejer la trampa donde atraparán sus presas, e incluso para desplazarse. Esta «tela de araña» es producida en pocas horas, por lo que la higiene de los posibles escondrijos (debajo de los muebles, en ángulos entre paredes, en los techos) es fundamental para combatirlas.
En http://es.wikipedia.org/wiki/Araneae encontrará más información sobre este depredador.
Principales plagas urbanas
En las ciudades hay numerosas plagas, pero las que siguen son las principales:
- Arañas: son una especie solitaria, que vive y caza durante la noche. Es fácil encontrarla en los rincones, entretechos, libreros, roperos y lugares poco visitados. Huyen del ruido y de la luz. Su mordedura puede ser mortal.
- Avispas: la chaqueña amarilla y la avispa papelera son muy parecidas en su aspecto físico. La chaqueña amarilla hace grandes nidos bajo tierra, mientras que la papelera los construye en los techos y aleros de las casas. Se alimentan de artrópodos, néctar, mielecilla, frutas; sólo la chaqueña amarilla es carnívora.
- Cucarachas: son insectos de hábitos nocturnos que habitan en lugares cálidos y húmedos, tales como las cocinas. Pueden transmitir peligrosas enfermedades.
- Hormigas: son insectos sociales que viven en grandes y complejas colonias. Pueden hacer sus nidos en el exterior como en el interior (cerca de fuentes de humedad tales como tuberías, maceteros, etc.). Se alimentan de carbohidratos azucarados, néctar de flores y secreciones azucaradas que dejan insectos chupadores en plantas ornamentales.
- Moscas: la mosca doméstica posee hábitos inmundos, ya que se alimenta de materia en descomposición, pudiendo ser vector mecánico de enfermedades al ser humano. Pone cientos de huevos cada 10 a 20 días.
- Mosquitos: los mosquitos y zancudos pueden transmitir peligrosas enfermedades, tales como malaria, dengue, fiebre amarilla, fiebre del nilo y otras. La hembra acosa y pica a su huésped con el propósito de obtener proteínas para la formación de huevos.
- Pulgas: sus largas y poderosas patas les permiten dar saltos de hasta 40 cm. Una vez completado su desarrollo, la pulga adulta puede emerger hasta 1 año después, lo que explica la presencia de ellas en sitios deshabitados. Pueden causar cuadros alérgicos en personas sensibles.
- Roedores silvestres: son reservorio del Hanta Virus, una grave enfermedad de curso agudo y elevada mortalidad que afecta al hombre. Es de hábitos diurnos y se alimenta de semillas.
- Roedores urbanos: la rata gris, rata negra o rata del tejado y la laucha o ratón casero son mamíferos muy prolíficos, destructivos y contaminantes, ya que pueden ser vectores de peligrosas enfermedades como salmonella, leptospirosis, triquinosis y otras. Son hábiles y desconfiados. Buscan alimento, agua y abrigo.
Fuente: Boletín Syngenta
Imagen: Plagastur