Para salvar a los jacarandás
Se está intentando salvar a los jacarandás -en la Ciudad de Buenos Aires hay unos 15.000 afectados- de la plaga que los ha atacado por primera vez: la «chinche de encaje», que es habitual en la mesopotamia.
En este momento se están tratando 156 ejemplares a los que se les ha inyectado veneno mediante un globo y una cánula que lo va liberando.
Según explicaron desde el área de Espacios Verdes y Arbolado que depende del Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad, el dispositivo de látex contiene un insecticida denominado imidacloprid. “Se trata de un insecticida sistémico que alcanza a todo el árbol. Actúa entre las primeras 24 y 48 horas, pero los inyectores se dejan unos días más para identificar a los árboles tratados y realizar el seguimiento”, explican.
Dentro del globo, el líquido está a baja presión, y a medida que va penetrando al interior del tronco a través de una cánula, se desinflan. La cantidad de inyectores varía de acuerdo al tamaño de cada ejemplar.
Fuente: clarín.com
Etiquetas: Chinches